
Lo primero, tener una mente abierta más a lo que se oye que a lo que se escribe.
Por ejemplo, Do Mayor, el simple acorde de las notas do-mi-sol suena muy diferente en la práctica según si omito, duplico o triplico qué voces, si invierto, si lo hago en el registro central o en varios registros (agudísimos y gravísimos, sólo graves...), en función de la dinamica de cada nota o del conjunto, arpegio ascendente, descendente, zigzag, posición abierta o cerrada, acordes repetidos, staccato, legato, otras articulaciones, tempo rápido o lento...
Un mismo acorde puede generar muchísimas sonoridades diferentes!!! Imaginaos cuando enlazamos dos acordes diferentes!!!
Te propongo que descubras nuevas sonoridades realizando todos estos ejercicios:
-Superposición de 5as ascendentes
-Id. con 4as (recomendación, con 4#), dar siempre el bajo
más grave y fuerte y con pedal, para no perder la referencia tonal
-Prueba a hacer 4as Justas descendentes desde tu meñique de la derecha, como referencia para saber en qué acordes estás... (hasta 6 notas o voces en principio, fíjate que con una más ya tienes el cluster o racimo, es decir, un anti-acorde, todas las notas de la escala diatónica sonando a la vez)
-Ritmos alternando las manos