"Del salón en el ángulo obscuro" :)
por no reponerse
los candiles ya mustios,
de la escuela olvidado,
silencioso, empolvado,
veíase... el piano.
Tenía mil amigos:
"Manos Dignas",
"Laboriosidad",
"Mentes Libres"
alias "Humanidad"...
y sólo un enemigo:
"Manos Largas",
que con sus dedos de porra
manchaba sin piedad.
Mil teclas-arcoiris soñó
y un mundo multicolor cantó
pero sólo oscuridad oscurantista
en su presente gris halló.
Dos señores enchaquetados
le recortaron el teclado:
"Manos Sucias"
y "Zarpas Usureras".
-"Para qué tanta tecla!
¡Primera y última, fuera!"
La octava justa trocó,
a séptima menor mermó.
Recortáronle las patas
y de rodillas le tocaban.
¡Qué humillación,
qué indignación,
qué sofocón,
qué maldición!
No le toquen los... bemoles,
dejad al piano tristoncio,
no le toquéis los... pedales,
va camino de soponcio.
No le agradan
los que no escuchan,
los que sólo le imponen
viejas cantinelas,
blancas que ya no cantan,
negras de alma muerta.
¡Piano, resuena!
¡¡Tecla, TRUENA!!
No le placen
las modulaciones
retrogradantes
ni las progresiones
descendentes.
A acordar acordes
estas cuerdas
nunca llegaron
(ni siquiera lo intentaron).
¡Ruje, piano!
¡¡CRUJE, teclado!!
En otra habitación te oye
otro piano olvidado,
y el órgano solitario
que por simpatía vibra
a tu lado, hermano.
También se suma el clave
¡la suma es la clave!
"Dedos Inocentes",
"Manos Limpias"
y "Nuevas Partituras" vienen,
¡Échaos una mano!Resiste, piano, aún queda
belleza sonora de sobra
en la coda de esta obra.
Otros instrumentos creen
que es posible un cantar nuevo,
otras músicas, diferentes,
un mundo sonoro pleno.
Sólo hay que abrir el oido,
sofocar miedo y ruido.
Esta reciente canción
escúchala en tu interior,
nota como late tu ilusión
y vuela con el corazón.
¡Va a ser NUESTRA CREACIÓN!
(Improvisación pseudopoéticomusical:) de Agustín Manuel Martínez)