"Señor Albéniz" -le dice el buen hombre-: le están esperando a usted para su curso!" -"¿A quién?" -"¡A usted, Albéniz!" -"!Pero si él ha muerto! Yo soy su hermano...
"El portero, azorado, lleva la noticia a la "Schola". Ya puede adivinar el lector el estupor de los miembros de la administración y de los alumnos...
Una delegación sale de inmediato rumbo a la residencia del pobre músico... quien les recibe riendo de la macabra broma..."