A menudo cuando converso con padres que conozco a quienes les pregunto si les gustaría que sus hijos estudiasen música, muchas veces la respuesta es: “es que mi hijo no sirve para la música”.
Es un argumento bastante pobre ya que estos mismos padres nunca se han planteado si su hijo sirve para estudiar y sin embargo recibe una educación en un colegio.
Es muy probable que a estos niños se les dé bien alguna asignatura en concreto o que se les de bien todas en general.
Y yo me pregunto: ¿si no se les hubiera dado la oportunidad de estudiar matemáticas, lengua, idiomas, etc, cómo sabrían estos padres si su hijo es bueno en una cosa o en otra?
Cuando un niño tiene tres o cuatro años, como los alumnos del método Suzuki, no tiene la capacidad de saber si le gusta una materia u otra, son los padres quienes tienen que decidir por él.
Shinichi Suzuki afirmaba que todos los niños tienen talento basándose en su larga experiencia en la enseñanza de los más pequeños.
Su conclusión es que si a un niño se le enseña a tocar un instrumento con naturalidad desde bien pequeño, con constancia y disciplina, cualquier niño puede llegar a tocar bien el violín, el piano u otro instrumento.
Por supuesto, algunos tendrán un proceso de aprendizaje más rápido que otros, pero todos llegarán a la meta, que no es otra que disfrutar tocando un instrumento y aprender más y más cada dia.
A los padres que me preguntan : “¿mi hijo tiene que estudiar todos los días el piano?” les contesto con otra pregunta : ¿su hijo come todos los días?.
Caso resuelto: TODOS LOS NIÑOS TIENEN TALENTO PARA LA MÚSICA.