¿Cuál es la primera experiencia que recuerda con la música?
Recuerdo
una enorme atracción por jugar con todo aquello que producía algún
sonido, incluyendo el sonido de las palabras. Esa atracción no ha
hecho más que aumentar con el paso del tiempo.
¿Qué
personalidad musical cree que le influyó más en su carrera?
Hay
muchas personas que han tenido una gran influencia y a las que estoy
profundamente agradecido. En todo caso, mi vida habría sido muy
distinta de no haber conocido a Carmen García Carbajo, Miguel
Frechilla, Guillermo González, Josep Soler, Pedro Aizpurua, Ramón
Barce…
¿Cuál
era el estilo o el compositor que más le gustaba estudiar de joven?
Siempre
he estado especialmente atraído por la creación contemporánea, no
solamente la musical. Pero, como siempre, me interesaba toda la
historia de la música.
¿En
qué repertorio se siente más a gusto en la actualidad?
Mi
repertorio está dedicado, fundamentalmente, a la música
contemporánea.
Cuéntenos,
por favor, alguna experiencia o anécdota que le venga a la memoria
que tenga que ver con el piano (en algún curso, o concierto...)
Una
tarde inolvidable, sentado junto a Paul Badura-Skoda mientras él
estudiaba un programa que iba desde J. S. Bach a F. Martin. Después
fuimos a cenar y habló de temas tan diversos como sus colaboraciones
con Furtwängler, Böhm o Karajan, sus preferencias literarias o las
elecciones francesas que tenían lugar por esas fechas.
¿Qué opina de la situación actual de la enseñanza del piano y la música?
La
enseñanza está siempre en constante revisión que amplía lo nuevo
y enfoca el pasado desde una perspectiva distinta. Es obvio que la
música necesita una presencia muchísimo mayor en la enseñanza
general. En lo que respecta al piano me referiré a una cuestión no
estrictamente de la técnica instrumental: creo que sería necesaria
una mayor profundidad en los contenidos relacionados con la historia,
la estética y el análisis.
¿Cuáles
son sus músicos favoritos?
A
la pregunta “qué libro salvaría de un incendio universal” un
conocido escritor respondió que lo pensaría tanto que arderían
todos. Me sucede algo parecido con esta otra… En cualquier caso,
desde hace muchos años comienzo cada mañana con Bach. Ha estado
conmigo y lo seguirá estando -es una de las pocas certezas que
tengo- todos los días de mi vida.
¿Cree
que es útil conocer recursos sobre improvisación? ¿Por qué?
Sólo
hace falta conocer mínimamente la historia de la interpretación
musical para darse cuenta de su valor e importancia. Andrés
Trapiello desea que sus novelas sean más un organismo que un
mecanismo. La improvisación es muy útil también para aplicar esta
idea a la música.
¿En
qué medida cree que es necesaria la creatividad para el pianista?
Indispensable,
por supuesto. En una doble dirección: lo abstracto que aporta una
luz a lo específicamente técnico y la propia técnica que descubre
posibilidades nuevas a través de sí misma y con otras
interacciones, al modo en que Lobo Antunes define la imaginación
como memoria fermentada.
¿Qué
proyectos musicales tiene en mente realizar?
Trabajo
en un proyecto que surgió como homenaje a Jordi Savall. Son obras de
catorce compositores españoles escritas a partir de un elemento
escogido por ellos entre las músicas más interpretadas por Savall a
lo largo de su trayectoria. También
en un programa sobre músicas de Francia y España en el que habrá
varios estrenos.
¿Qué
consejo o recomendaciones daría a los que empiezan ahora a estudiar
el piano?
Que
el trabajo es enorme pero la recompensa es aún mayor.
¿Quiere
añadir algo más sobre su relación con la música?
No
concibo la vida, ni me concibo a mí mismo sin escuchar, interpretar
y pensar la música.
http://www.youtube.com/watch?v=_2OWM1mNJlc
www.fernandezmagdaleno.com