Por: Sara Dominguez
La arquitectura, la escultura, la pintura, la música, la danza, la poesía y la literatura, y finalmente el cine. Esas son las siete artes que definió el crítico Ricciotto Canudo en su Manifiesto de las siete artes para incluir al cine entre ellas.
Todas estas disciplinas se caracterizan por estar realizadas con una finalidad estética, aunque también comunicativa. En las artes importa tanto el continente como el contenido. Son la representación más viva de la cultura en las sociedades humanas.
Pero, lejos de lo que mucha gente puede pensar, las artes no solo tienen una finalidad estética, ideológica o de expresión de ideas, sino que sirven a los artistas para desarrollarse personal y profesionalmente.
Con la música vemos un claro ejemplo de ello, aprender a tocar un instrumento tiene importantes beneficios en todos los niveles, y si además ese instrumento es el piano, la lista de consecuencias positivas se multiplica.